Llega el momento de que el técnico de tu empresa mantenedora visite tu finca a fin de realizar tareas de mantenimiento preventivo de tus equipos.
Te recordamos que este tipo de mantenimiento es necesario para garantizar la seguridad de los usuarios y el cumplimiento de la normativa vigente, y para minimizar el gasto en reparaciones.
Analizados minuciosamente todos los elementos de seguridad de tu ascensor, el técnico especialista señala como deficiencia la longitud de los cables de tracción. ¿Qué significa eso? ¿Qué ha podido ocurrir y cómo se soluciona?
Empecemos por el principio…
¿Qué son los cables de tracción de un ascensor?
Se trata de unos cables de acero, cuyo espesor y número depende de la carga del ascensor, que van desde el chasis de la cabina —al que se unen por medio de los tensores— hasta el del contrapeso, pasando por la polea motriz.
¿Por qué razón es necesario acortar los cables de tracción del ascensor durante el mantenimiento?
Debido al propio uso del ascensor, estos cables tienden a estirarse prácticamente a lo largo de toda su vida útil, aumentando de longitud.
Como parte del protocolo de mantenimiento, el técnico sitúa la cabina del ascensor en el piso más superior de todos. Haciendo esto, el contrapeso se situará en la parte de abajo y, desde el foso, el inspector podrá comprobar qué distancia queda entre el contrapeso y el muelle.
La normativa exige que la distancia mínima entre esos dos elementos sea de, al menos, 15 centímetros. ¿Por qué?
- Imaginemos que la cabina, por cualquier circunstancia, se «salta» el nivel de planta del piso superior, situándose unos 10 centímetros por encima de lo previsto. En ese caso, tendríamos margen para que la cabina subiera esos 10 centímetros extra sin que el pasajero que esté en su interior note ningún golpe brusco (recordemos que el contrapeso no ha llegado a apoyar sobre el muelle).
- Ahora imaginemos que el contrapeso, en vez de estar a unos 15 centímetros de distancia con respecto del muelle, estuviera a solo 5. En este caso, si la cabina subiera 15 centímetros por encima del nivel superior, el contrapeso se «estrellaría» bruscamente contra el muelle, al no disponer de espacio suficiente para apoyar sobre él (con el consecuente golpe que va a sufrir el usuario que viaja en el interior de cabina).
Hay una cosa clara y evidente: todo lo que ocurra bruscamente en el contrapeso influye bruscamente en la cabina (esto es, en el confort del viaje).
Esa es la razón por la que siempre se debe dejar un margen de espacio suficiente entre el contrapeso y el muelle. ¿Cuánto? Como decíamos, la normativa habla de unos 15 centímetros como mínimo. No obstante, en FAIN Ascensores normalmente dejamos entre 20 y 30 centímetros en el momento de la instalación de los cables en previsión de este estiramiento.
¿Cómo acortar los cables de tracción del ascensor y con qué frecuencia?
Al margen de dejar una distancia suficiente entre el contrapeso y el muelle, la solución para corregir este defecto que sale en la inspección, así como para evitar sustos y situaciones desagradables, pasa por acortar los cables de tracción.
De ello se ocupará tu empresa mantenedora y, en concreto, técnicos especializados con gran formación y experiencia en esta tarea.
- ¿Cómo se hace? Se anulan la cabina y el contrapeso, los cuales quedan suspendidos en un punto fijo del cuarto de máquinas. A continuación, se realiza la sustitución de los cables uno por uno, trabajando siempre con seguridad para que el ascensor no se desplome.
- ¿Cuánto se tarda? En lo que respecta a la duración de estos trabajos, aunque varía en función del tipo de ascensor, acortar los cables de tracción no lleva más de 2 horas y media en la mayoría de los casos.
- ¿Con qué frecuencia hay que acortar los cables? Dependerá del tipo de ascensor, de los propios cables, del peso que soporte la cabina y del tránsito de viajes al día.
Si tienes cualquier duda al respecto, o quieres consultarnos acerca de otras medidas mínimas de seguridad para tu ascensor, recuerda que estamos #SiempreDisponibles.
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