Los ascensores son medios de transporte que utilizamos todos los días, y el desgaste causado por el uso regular incide en su rendimiento y eficiencia. Por eso es necesario llevar a cabo una renovación de ascensores total o parcial cada cierto tiempo y según el caso. En concreto, la vida útil promedio ronda los 20-25 años, momento en que se recomienda el cambio del ascensor.
La señal más evidente que da la voz de alarma y pone de manifiesto la necesidad de renovar el ascensor es cuando un equipo de más de 20 años empieza a sufrir averías constantes, cuyas reparaciones son cada vez más costosas y llevan tiempos cada vez más dilatados. Las piezas de repuesto para equipos que llevan más de 10 años sin producirse quedan descatalogadas esto hace las reparaciones son muy difíciles de realizar y, en ocasiones, no resultan tan perfectas como cabría esperar.
Si tu equipo pasa más tiempo parado que funcionando, te recomendamos evaluar una sustitución completa del ascensor. Recuerda que la renovación del ascensor o la sustitución total supone múltiples beneficios: más seguridad, menos averías (y menos costes), nuevas funcionalidades, mayor eficiencia energética, más suavidad, funcionamiento más silencioso, y acabados superiores, más contemporáneos, adaptados a los nuevos tiempos.