Esta obra es la única de su barrio que es perceptible desde la calle, pues el resto se hicieron por el interior de los edificios.
En FAIN diseñamos la estructura, forrada de aluminio blanco lacado, en sintonía con la perfilería y las ventanas de este inmueble de 5 alturas que alberga a 20 vecinos.
El objeto, en concreto, fue un ascensor con 10 paradas y de doble embarque a 180º, necesario para garantizar la accesibilidad de los vecinos de las distintas letras (puertas) del rellano.
Por último, la bajada a cota cero del elevador se realizó por el mismo patio, con rampa en zig-zag, y colocando una verja cuya puerta comunica directamente con la calle.